Desde fines del año
Mientras hablan de planes de recuperación y se felicitan por enfrentar la crisis ocultan deliberadamente como hacen para solucionar los negociados y fraudes especulativos que llevaron al mundo al borde del abismo, que es donde aún estamos los pueblos.
En el año 2009 el número de multimillonarios pasó de
¿Cómo hicieron? A pesar que siempre escuchamos que el capitalismo decía y dice que el Estado no debe interferir con el Libre Mercado fueron precisamente los dineros fiscales, nuestro dinero, los que salvaron a la mayoría de las empresas financieras y bancos en quiebra. Las ganancias nunca disminuyeron y la plata no la devolvieron ni la van a devolver. EE UU financió al famoso Libre Mercado con más de diez billones de dólares que han contribuido a mayor desocupación, menos salud y peor calidad de vida del país que se ponía como ejemplo frente al mundo. Vuelve a desnudar su vieja y conocida cara de pirata y esclavista moderno de toda la humanidad.
Desde la caída de la producción industrial en todo el mundo, el dinero se canalizó al mercado de valores y también a las materias primas, commodities, generando una nueva burbuja financiera. Invierten fuertes sumas de dinero en materias primas acaparándolas a fin de especular para que suban mucho, y después las venden en todo el mundo, como así también compran a futuro. Esto explica los enormes aumentos en los precios del trigo, la carne, el petróleo etc.
En nuestro país, padecemos las consecuencias de esta política, ya que el modelo agroexportador, que producía alimentos para nuestro consumo exportando el resto, hoy se modificó dedicándose a la especulación financiera. Producción intensiva de alimentos modificados genéticamente, con alto contenido de venenos, monocultivados para los agrocombustibles, alimento balanceado y no para satisfacer las demandas nutricionales de la humanidad. La producción de monocultivo, soja y maíz principalmente atenta contra la soberanía alimentaria de las naciones y la sustentabilidad y sostenibilidad de los recursos naturales.
Esta nueva canallada produjo una mayor concentración y acumulación del capital, el alejamiento definitivo del capital financiero de la producción industrial, dedicándose casi exclusivamente a la especulación financiera mediante préstamos e inversiones en la bolsa, destruyendo el capital productivo, eliminando o disminuyendo el costo laboral y apropiándose de los recursos públicos. Lejos de servir al pueblo financian a los fondos buitres y terminan quebrando estados como Grecia, Irlanda, España o los países del Este de Europa. Sin olvidar que en nuestro país financian a casi todas las empresas multinacionales para garantizar sus enormes ganancias a costa del dinero del pueblo como es el caso de las empresas de transporte, ferrocarriles, colectivos y subterráneos, las boletas de luz y gas, instituciones de educación privada etc. El gobierno paga a las empresas para garantizar sus ganancias principalmente con dineros que podrían servir para mejorar la salud, la educación, el transporte o nuestros salarios.
Esta crisis de créditos basura, más la acción de las burguesías globales, se utilizaron para transformar la deuda de los banqueros en deuda pública, lo mismo que hizo el entonces presidente del Banco Central durante la dictadura Domingo Cavallo, que aumentó la deuda externa en mas de 30000 millones de dólares, monto que debían pagar las empresas privadas por haber pedido préstamos al extranjero. Perdonó la deuda a los patrones dejando a nuestro sufrido pueblo con una deuda que no contrajimos.
Y pensar que hay algunos que discuten pagar semejante fraude del libre mercado. El FMI junto al Banco Mundial se dedicaron a romper las barreras que se oponían al control del mercado mundial de parte del capital financiero, quien al utilizar los dineros fiscales han logrado una alianza estratégica político financiera militar para el dominio mundial, permitiendo el fraude, la especulación financiera y los paraísos fiscales.
La punta del iceberg de la crisis económica esta en las burbujas financieras construidas mediante la especulación; billones de dólares yendo de mercado en mercado, despojados de su valor real y soportados por un papel moneda (el dólar por ejemplo) emitido con generosa irresponsabilidad por los bancos centrales.
No es posible entender esta situación sin el conflicto permanente entre el dinero cada vez en menos manos, y las dificultades de cada vez más personas para acceder a condiciones de vida y trabajo dignas, la demanda social de servicios y la privatización de dichos servicios, en máximo beneficio para la humanidad y su relación con la naturaleza.
Nada va a cambiar espontáneamente, a nivel mundial vienen por nuestros derechos. Aumentaron la edad de jubilación, los despidos y bajaron los sueldos en muchos países, además flexibilizaron las leyes laborales. En nuestro país avanzaron sobre muchas leyes obreras que costaron años de lucha como la estabilidad laboral, sábado inglés, horas extras, vacaciones, escalafón, antigüedad etc.
La desocupación junto al trabajo en negro y las “changas”, a los que se agregan los bolsones de comida, los planes trabajar o como sea que se llame, en cualquier parte del país, a esa limosna que da el Estado para que el hambre no obligue a los más pobres a tomar los mercados y almacenes como ya sucedió, y para mantener a millones de desocupados permanentes como mano de obra barata como reserva de los fines de la patronal. Esta situación hizo que mucha gente pierda la confianza en sí misma, la esperanza de trabajar algún día y ni pensar en estudiar.
La nueva asignación universal por hijo, tan propagandizada por el Estado como una forma de distribución de la riqueza, no es mas que otra mentira, porque lo que necesitamos es trabajo estable y un salario que cubra nuestras necesidades, y no estos planes que se aprovechan de la pobreza en la que esta sumida el pueblo sin mejorar el reparto de nuestras ganancias en relación con las ganancias de la burguesía.
Es ardua la tarea para que el pueblo todo, recupere su dignidad, su condición humana. Creemos que el camino es la unidad y la lucha, trabajadores, estudiantes y desocupados, precarizados y en negro, los que nada tienen y los que al menos tenemos trabajo.
Todos juntos peleando por una vida mejor. Creemos que es posible.