El 20 de enero diversas organizaciones territoriales, sociales, de trabajadores ocupados y desocupados, políticas y culturales, marchamos desde el Obelisco porteño hasta la sede del Banco Central para expresar nuestro repudio a la decisión de Cristina Fernández y Martín Redrado de pagar la deuda externa con dinero de nuestro pueblo que vive en la miseria.
Sabemos que la disputa entre ambos es como la del campo y el gobierno: pelean por intereses económicos sectoriales de los poderosos y al mismo tiempo comparten y defienden el sistema explotador que oprime a los trabajadores y a todo el pueblo pobre.
El MTR (Movimiento Teresa Rodríguez), el TODU (Trabajadores Ocupados y Desocupados Unidos), el Bloque Obrero y Popular (Movimiento 26 de Junio – MTD Quilmes), el MAR (Movimiento Argentina Rebelde), el MBL (Movimiento Brazo Libertario), el FUTRADEyO, la OLNyS Fogoneros, el MG (Militancia Guevarista), el PRIS (Proyecto Revolucionario Indoamericano y Socialista), el MRS (Militantes por la Revolución Social), el grupo Mascaró Cine Americano y la Asociación de ex trabajadores y Familiares de Desaparecidos de Mercedes Benz Argentina, compartimos las calles céntricas de la Capital Federal en una movilización de dos cuadras de extensión y llegamos a la puerta del Banco Central.
Allí, varios compañeros representando a sus respectivas organizaciones, manifestaron en sus discursos la misma consigna: No al Pago de la Deuda Externa. Compartimos además otras reivindicaciones populares como la defensa de nuestros derechos como el trabajo digno y genuino, la salud, la vivienda, la educación, el desprocesamiento de los luchadores populares, el cese de las persecuciones y la libertad de todos los presos políticos.
Luego de la marcha y antes de desconcentrarnos tras regresar hacia el punto de partida inicial, los referentes de las distintas organizaciones hicimos una breve reunión de evaluación en la que la que las opiniones fueron coincidentes y unánimes: la actividad fue exitosa, lo planificado se cumplió al pie de la letra, el objetivo de repudiar claramente tanto al gobierno como a la oposición trucha que en este caso encabeza Redrado fue cumplido, y la disposición de seguir por este camino de unidad en la lucha, organización y voluntad política de enfrentar las intenciones de los sectores hoy dominantes se manifestó en todo momento, alejándonos de todas las posturas oportunistas, reformistas, populistas y claudicantes.
“Todo para el Pueblo, Nada para la Deuda”, resume la línea política de lo sucedido ayer en Buenos Aires y se une a los esfuerzos similares de organizaciones y compañeros que en todo el país han decidido que sólo la lucha nos hará libres y que no existe enemigo que no pueda ser vencido.
